Cosmética Corporal

¿Cómo aplicar los productos de cosmética corporal?

Hoy en día saber aplicar de manera adecuada los productos de cosmética corporal no es tan fácil. Hay una serie de tips que tienes que conocer para poder lograr que tus productos de cosmética corporal logren los efectos deseados.

Hay unas normas generales para la correcta aplicación de estos productos, y a veces, un uso indebido puede provocar daños en la piel. 

Si quieres que tu piel esté siempre limpia, lo ideal es que realices exfoliaciones periódicas siempre prestando atención a las zonas sensibles. Hazlo con movimientos circulares haciendo que se active la circulación. Lo ideal es realizar estas exfoliaciones 1 ó 2 veces por semana. 

Por otra parte, en Laguna queremos insistir en que la piel ha de estar siempre correctamente hidratada. Es necesario que uses producto de hidratación acordes con tu tipo de piel de manera diaria. 

Lo imprescindible para una buena cosmética corporal:

Recuerda los tipos de piel e identifica la tuya

Es importante que recuerdes los tipos de piel. A la hora de comprar cosméticos es importante tener esto en cuenta, al igual que hacíamos a la hora de escoger productos cosméticos faciales en general. 

Te los recordamos: 

• Piel normal: Es el tipo de piel más agradecida en cuanto a que no presenta complicaciones como rojeces, irritación... Esto se debe fundamentalmente a que la hidratación es equilibrada y regular. Puedes escoger productos muy variados, como tónicos, productos de cosmética con fragancia y optar por productos con o sin acete, a voluntad. Dependiendo siempre de cómo te sientas más cómoda o cómodo. 

• Piel Grasa: Se denomina piel grasa porque genera un exceso de sebo en mayor o menor medida. Esto suele poder identificarse en zonas determinadas como por ejemplo la frente o la barbilla. Los poros, están un poco más dilatados de lo normal por lo que este tipo de pieles tienden a crear granitos, puntos negros o espinillas. Es importante que optes por productos sin aceites y matificantes. Hay que hidratar la piel siempre, independientemente del tipo de piel que sea, pero en este caso, hay que hacerlo con productos astrigentes. 

• Piel Seca: Este tipo de pieles tienden a la pérdida de hidratación porque retienen líquidos en las capas superficiales de la piel. Se reconoce porque a veces son un poco ásperas, finas y tirantes. Lo bueno de las pieles secas es que no suelen tener imperfecciones o granitos, porque no generan sebo. En este caso, no hay que usar nunca productos con fragancia, colorantes o limpiadores agresivos. Lo mejor es usar productos de cosméica nutritivos que hidraten y sean favorables para este tipo de piel. 

• Piel Sensible: Es quizás el tipo de piel más delicado. Se irrita y reseca, sobre todo si la expones a agentes externos agresivos como alcohol o fragancias fuertes. Tener la piel seca no exime de tenerla grasa o seca, por lo que es muy importante poner cuidado del tipo de productos cosméticos que se emplean. Lo mejor será que te fijes en composición, y si tienes piel atópica, es de vital importancia que te fijes bien y no compres productos que puedan hacerte daño. 

• Piel Mixta: Es fácil de identificar debido a que tiende a generar brillos  en ciertas zonas de la piel, mientras que en otras, puede tender a ser seca. Las personas con pieles mixtas, tienen que usar tratamientos cosméticos destinados a ellas. Recuerda, que debes mantener siempre la hidratación, pero de manera equilibrada, sin resecar ni favorecer a la creación de sebo

Composición de los productos de cosmética corporal

Hay muchos tipos de productos cosméticos, y muchas composiciones diferentes que pueden ayudarte a sacar todo el partido a la belleza de tu piel. Es importante que tengas en cuenta todos estos princpios para que puedas escoger el producto que más se ajuste a ti y a tus necesidades. 

Los productos de cosmética además de su composición general suelen tener una gran cantidad de igredientes que hacen que la textura mejore, o le aporte una u otra fragancia. 

Distinguimos cuatro principios activos principales:

•  Principio activo: Este es el ingrediente fundamental de todo producto de cosmética corporal. Cada producto tiene el suyo, y es el encargado de que el producto cumpla la función para la que ha sido pensada. 

• Conservantes: Son las sustancias que mejoran la conservación de producto cosmético. Le aportan una mayor vida, pero también hacen que las características no se pierdan con el paso del tiempo. Los cosméticos necesitan de estos componentes para no corromperse una vez los hemos abierto, además, lo protegen de hongos y bacterias. 

• Excipientes: Le dan cohesión a los principios activos junto con el resto de componentes. Suelen ser los responsables del resultado final en la textura del producto. Si por ejemplo, escoges un producto cosmético en formato de gel, probablemente su excipiente fundamental sea el alcohol. 

• Perfumes, correctores y colorontes: Le aportan un color determinado, un aroma... Es posible que los cosméticos se mejoren con este tipo de componentes para darle una mejora en cuanto a apariencia y olor.